La Comunidad Valenciana, conocida por su rica historia, su vibrante cultura y su impresionante costa, está emergiendo como un núcleo de innovación y emprendimiento en el sector aeroespacial. Este sector, aunque todavía en sus etapas iniciales, está mostrando un potencial significativo para convertirse en un jugador relevante dentro del panorama aeroespacial español.
En el corazón de esta transformación se encuentra la ciudad de Valencia, que no solo es la capital de la comunidad, sino también el epicentro de un movimiento que busca posicionar a la región como un punto de referencia a nivel nacional e internacional. Todo ello contando con el apoyo de las instituciones, universidades y centros de investigación, y la colaboración entre las empresas.
La industria aeroespacial es un sector estratégico que representa casi un 7% del PIB industrial de España, y desde Espai Aero – primera asociación aeroespacial de la Comunitat Valenciana – se trabaja para que la Comunitat Valenciana represente un alto porcentaje de esa facturación y contribuya significativamente al tejido industrial y tecnológico autonómico.
Tejido empresarial regional: espacial y aeronáutico
El sector espacial valenciano está marcado por la presencia de pequeñas y medianas empresas (PYMEs) que abarcan una amplia gama de la cadena de valor. Aunque cada segmento cuenta con un número limitado de empresas, esta diversidad es una potencial fortaleza, ya que fomenta la especialización y la colaboración.
PLD Space, con sede en esta región, es un claro ejemplo del dinamismo del sector espacial. La empresa ha logrado una inversión de 120 millones de euros – de los cuales 42 millones del PERTE de un lanzador espacial español, impulsado por el Gobierno de España, que la empresa ganó a finales de enero del 2024. Dicha inversión refleja la confianza en su potencial para contribuir significativamente al sector. Con el lanzamiento exitoso de su cohete Miura 1 y la planificación del Miura 5, PLD Space se posiciona como una fuerza impulsora en la industria, apoyando la visión de la Comunidad Valenciana de convertirse en un hub de innovación aeroespacial.
En cuanto al sector aeronáutico, la región destaca por su competencia en MRO (mantenimiento, reparación y operaciones). Aunque hay una notable ausencia de fabricantes de equipamiento original (OEM) y de empresas tractoras de primer nivel (TIER1), la Comunidad Valenciana ve una oportunidad significativa en el sector de los UAVs/drones. Con la experiencia acumulada en MRO, las empresas valencianas están bien posicionadas para aprovechar el crecimiento del mercado de drones, especialmente en aplicaciones comerciales y de vigilancia.
Clúster aeroespacial
En este contexto evolutivo de la industria aeroespacial, nace Espai Aero – la primera asociación aeroespacial de la Comunitat Valenciana – claro ejemplo de la ambición y el espíritu colaborativo que impulsa al sector. Su objetivo es claro: desarrollar una estrategia integral que impulse el crecimiento del sector aeroespacial en la Comunidad Valenciana trabajando en estrecha colaboración con todos los actores relevantes, desde empresas, entidades transversales, organismos gubernamentales hasta instituciones educativas y centros de investigación.
Con sede en la ciudad de Valencia, donde se encuentran la mayoría de las entidades, han pasado de 6 a 20 socios en un solo año: 2 startups, 2 universidades, 1 institución pública, 2 centros tecnológicos y 13 empresas. Las expectativas van mucho más allá pues en el mapeo que actualizan de forma regular son 80 las empresas que podrían aportar al sector (63% en Valencia).
Una de las empresas en sumarse a esta Asociación ha sido Deimos Space, caso de éxito de Invest in Valencia. La empresa se especializa en una amplia gama de actividades dentro del sector aeroespacial y de ingeniería. Su enfoque abarca desde el diseño, proyecto y desarrollo hasta la producción, construcción y montaje de sistemas aeroespaciales.
El presidente de Espai Aero y CEO de Comet Ingeniería, Pepe Nieto, destaca el crecimiento sin precedentes de las pymes del sector espacial en la Comunitat Valenciana y la importancia de unirse como asociación para generar sinergias y aunar esfuerzos. Esta colaboración es clave para el desarrollo industrial y tecnológico, así como para la creación de empleo de alto valor añadido en la región.
Aquí está el listado completo de socios: NAX, ARKADIA SPACE, COMET INGENIERIA, PLD SPACE, ORBITAL EOS, FENTISS, UPV, UJI, AIDIMME, AIMPLAS, WEITEC, LOGO 2, CALSENS, DEIMOS, FI GROUP, AEROCAS, ABIONICA, URJATO, BOLLORE LOGISTICS, EQUIP ELECTRONICS.
Universidades
Las universidades de la Comunidad Valenciana son pilares de conocimiento y experiencia en el sector aeroespacial. Ofrecen programas educativos especializados y albergan grupos de investigación activos en la vanguardia de la tecnología aeroespacial.
La ciudad de Valencia alberga la Escuela Técnica Superior de Ingeniería Aeroespacial y Diseño Industrial (ETSIADI) de la Universitat Politècnica de València (UPV), donde se imparte la titulación de ingeniería aeronáutica desde el curso 2005/2006. Así como el Máster Universitario en Ingeniería Aeronáutica. Esta institución ha sido fundamental en la formación de un centenar de ingenieros anualmente, quienes están contribuyendo al crecimiento y la innovación del sector.
Un ejemplo destacado de grupos de investigación activos es el grupo de aviones no tripulados de la UPV, que no solo contribuye al desarrollo de drones en la región, sino que también impulsa la innovación a nivel nacional.
Valencia también potencia el espíritu emprendedor, y de hecho ya son varias las spin-offs del sector que han surgido de la UPV, como fentISS, especializada en el desarrollo de software de sistema para sistemas críticos de tiempo real embarcados en satélites, y DAS Photonics, que desarrolla productos basados en tecnología fotónica.
Conclusión
En resumen, la Comunidad Valenciana, con Valencia a la vanguardia, está posicionándose como un centro de excelencia en el sector aeroespacial. A través de la educación, la innovación y la colaboración, está sentando las bases para un futuro brillante en el que el cielo no es el límite, sino el punto de partida hacia nuevas fronteras y oportunidades.
